PARTIDO
VAREA	1-2	RAYO B

 

FICHA TÉCNICA:

 

VAREA: Pinillos; Huerta (A), Julio, Manero, Díaz; Adrián (A) (Asier 65’), Willy (A), Mario (Juan 73’), Tamayo (A); Ubis (Rubén Pérez 76’) y Saúl (Txomin 73’) (A).

 

TORREJÓN: Molina; De las Sías (Iván Alonso 46’), Lozano (A) (Guzmán 64’), Revuelto, Robles (Sergio Alosno 76’); Aitor, Becerra (César 64’), Juanchi; Baladía, Etienne e Ybarra (Hugo 64’).

 

GOLES: 0-1 Etienne (26’); 1-1 Ubis (penalti) (65’); 1-2 Etienne (75’).

 

ÁRBITRO: García Rubio, colegio cántabro.

 

INCIDENCIAS: Ángel Aguado, unos 400 espectadores.

 

 

CRÓNICA DEL PARTIDO:

 

Etienne hace rozar el ascenso

 

Un nuevo doblete del pichichi del filial deja el ascenso muy cerca para el Rayo Vallecano B

Informa: Isma Corregidor.

 

El Rayo Vallecano B toca con la yema de los dedos el ascenso a Segunda RFEF. Sin hacer un gran partido, el equipo de Jorge Vallejo cumplió con el pronóstico y se impuso por 1-2 a un Varea más combativo de lo esperado.

De inicio el Varea demostró que no había llegado a la final para ser un convidado de piedra. Con un punto más de intensidad, y yendo a apretar arriba, el equipo de Adrián Gallego puso en más de un apuro al Rayo B. Aunque a decir verdad, parecía más demérito del filial que otra cosa. Los de Vallejo, jugaban con una tranquilidad impropia de la talla del partido, y perdieron muchos balones en zona peligrosa, incluido dentro del área. Ello propicio que Molina tuviera que meter dos grandes manos para evitar el 1-0. La primera, en un disparo raso de Adrián, que iba por donde más les duele a los porteros, junto a la cepa del poste. La segunda, en el ecuador del primer tiempo, a chut de Tamayo, que acabó estrellando el balón en el poste.

Precisamente tras la madera del Varea, llegó el primer tanto del Rayo B. En una muestra que de lo que viene siendo el equipo de Vallejo en este play off. Aunque había avisado antes con un chut de Etienne y otro de Ybarra, a la primera clara que tuvo el filial, se adelantó en el marcador. Tras un balón desde la banda diestra, Etienne remató desde dentro del área, cruzando el esférico a donde no podía llegar Pinillos, al que el estado irregular del césped le jugó una mala pasada, al botarle el balón.

El 0-1 mató las ilusiones riojanas. Aunque los de Adrián Gallego no bajaron los brazos, si se toparon con un Rayo B más similar al habitual. El gol hizo meterse a los vallecanos en el partido, acaparando el balón, y, sobre todo, no cometiendo errores, y jugando alejado de su área. Aunque eso sí, a los de Vallejo les faltó un punto de ambición para ir a sentenciar el partido, debido a la renta ya obtenida.

Pero toda la mejoría del final del primer tiempo, despareció en el segundo. De hecho, el comienzo del segundo acto fue muy similar al primero. El Varea, más metido en el partido, con más intensidad, y yendo a buscar al Rayo B, sabiéndose que ya nada tenía que perder. Eso si, esta vez los vallecanos defendieron mejor, sin conceder tantos errores, ni opciones a un Varea que comenzaba a estar mermado por el cansancio, y que demostró estar un punto o varios por debajo del filial.

Cumplida la hora de partido, el Varea logró empatar el partido, por un nuevo error visitante. César, que acababa de entrar (era su primera jugada, pues llevaría veinte segundo sobre el césped) derribó al veterano Ubis dentro del área, decretando el colegiado penalti sin dudarlo. La pena máxima se encargó de ejecutarla el propio Ubis, que, a lo Panenka, hizo el 1-1.

Reestablecida la igualada, el Rayo B se puso las pilas. Los de Jorge Vallejo dieron un paso al frente, salieron de su campo, y comenzaron a llegar al área rival, algo que no había ocurrido prácticamente en todo el primer tiempo, salvo en una falta de Baladía. Parecía que era cuestión de tiempo que los madrileños se volvieran a poner por delante, y aunque Sergio Alonso rozó el gol tras una jugada personal, tuvo que aparecer el de siempre para cobrar ventaja de cara a la vuelta. A quince para el final, Etienne recibió el balón dentro del área, salvó al defensa con un control precioso, y solo ante Pinillos, volvió a batir al cancebero local.

Por debajo de nuevo en el marcador, el Varea tuvo un atisbo de reacción, con más corazón e intención que otra cosa. Aunque los riojanos dieron un paso al frente, solo fueron capaces de hacer daño al Rayo B a balón parado, aunque sin rematar con verdadero peligro. Y con espacios, el filial tuvo alguna opción a la contra para quitare más emoción a la vuelta. Todo cuando los locales estaban con diez, al retirarse lesionado Txomin, con tres ventanas de cambios agotadas por el técnico local, aunque sin agotar los cambios.

De este modo, el Rayo B cumplió con su papel de favorito, llevándose una renta mínima para Madrid, pero con la sensación de que algo muy muy raro tendría que ocurrir para no ascender.